Uno de los muchos problemas que padece el
sapo partero bético (Alytes dickhilleni) es
que, para reproducirse, a veces utiliza construcciones humanas viejas
y deterioradas. Esto ocurre en varios lugares del Parque Natural de la
Sierra de Huétor (Granada), como la alberca de Bolones, un depósito de
agua construido para las repoblaciones forestales del siglo pasado.
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Alberca de Bolones llena (agosto de 2010)
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Alberca de Bolones casi vacía (agosto de 2015)
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Esta alberca suele estar bastante llena, pero
este verano el nivel del agua ha descendido muchísimo debido a la escasez de
lluvia, la intensa evaporación y, sobre todo, a la existencia de grietas que
parecen haberse agrandado en los últimos meses. Durante el actual mes de
agosto, la Delegación provincial de Medio Ambiente ha tenido que llevar agua varias
veces en camiones-cuba para asegurar la
supervivencia de las larvas presentes en el agua. Sin embargo, la medida ha
sido insuficiente pues el nivel ha seguido bajando hasta límites
alarmantes, por lo que ha sido necesario trasladar las larvas hasta otros lugares
del Parque. Algunos miembros de la AHG (Asociación Herpetológica Granadina)
hemos colaborado en el último de estos traslados, cuando sólo quedaban 14 cm de
agua (la alberca tiene 150 cm de altura). En total se han trasladado en los
últimos días más de 3.000 larvas.
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Capturando larvas en la alberca de Bolones
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Esperando el traslado |
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Soltando las larvas en otra alberca que sí conserva agua
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Estas actuaciones de emergencia solventan provisionalmente el problema, aunque la solución definitiva es impermeabilizar la alberca. Sólo así seguirá siendo este lugar uno de los mejores para la cría de esta especie en todo el
Parque Natural.
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Adulto de sapo partero bético (Bolones, enero de 2014) |