domingo, 24 de abril de 2016

Pequeños arreglos en un abrevadero

     Varios miembros de la Asociación Herpetológica Granadina hemos estado haciendo unos pequeños arreglos en un abrevadero donde cría el sapo partero bético (Alytes dickhilleni), en el Parque Natural de la Sierra de Huétor (Granada).


Éste es el abrevadero

     La llave de paso para vaciar el abrevadero está en una arqueta que no tiene tapadera, porque alguien se la ha llevado, de modo que cualquier persona podía vaciarlo y provocar la muerte de las larvas. Para evitarlo, hemos puesto una tapadera nueva de hierro, encargada a medida, ajustada con cemento y provista de un candado.


Sin tapadera, cualquiera podía abrir la llave y vaciar el abrevadero

Colocando la tapadera

Así está mejor
     
     La entrada del agua está en otra arqueta que sí conserva su tapadera, aunque no tiene cierre. De aquí se han llevado el regulador de nivel que controla el paso del agua, así que hemos puesto uno nuevo. Y para evitar más robos hemos colocado una barra de hierro, también con candado, que impide levantar la tapadera.


En esta arqueta había que colocar una barra de hierro

Ya colocada, la barra impide abrir la arqueta
     Esperamos que estos arreglos duren.

viernes, 15 de abril de 2016

Una charca menos

     El pasado 9 de abril, varios miembros de la Asociación Herpetológica Granadina estuvimos en el oeste de la provincia de Granada, una zona con alta diversidad de anfibios. Nos adentramos también en la provincia de Málaga para visitar una charca en el término de Periana, en donde habíamos visto en otra ocasión tritones pigmeos (Triturus pygmaeus) y ranitas meridionales (Hyla meridionalis) -especies de distribución muy escasa en el sudeste peninsular-, junto a otros anfibios más extendidos, como gallipatos (Pleurodeles waltl) y sapos comunes (Bufo spinosus).
     Nuestra sorpresa -y decepción- fue enorme al observar que la charca ya no existía. La ladera herbosa donde antes se encontraba había sido aplanada, seguramente con maquinaria pesada, y la depresión donde se acumulaba el agua había desaparecido. Ahora era una ladera lisa, destinada a ser pronto cultivada.


En segundo término (color oscuro) aparece la ladera allanada para su cultivo

En Google Earth aún puede verse la charca (mitad inferior izquierda)

     Ignoramos si la Consejería de Medio Ambiente de Málaga conocía la existencia de esa charca. Ignoramos también si sabe que ahora ha desaparecido. Tampoco sabemos si el dueño del terreno era consciente de lo que tenía en su finca. Lo que sí sabemos es que se ha perdido otro enclave importante para los anfibios, uno más en este goteo continuo y silencioso de desaparición de pequeños humedales, que parece imposible de frenar.


Ranita meridional (Hyla meridionalis)