domingo, 11 de noviembre de 2012

CITA DE PALPIMANUS GIBBULUS PARA GRANADA


Este verano al recorrer la sierra de Loja y tras prospectar una zona de espartos, encontramos una araña un tanto peculiar: la Palmimanus gibbulus, se trataba de un arácnido de pequeño tamaño, unos 7-8 mm, de constitución robusta que en un principio nos recordó a la gran Macrothele calpeiana  pero  con un prosoma cuadrado y en conjunto de tonos rojizos siendo mas intenso el color rojo en el opistosoma, también se observa pilosidad por todo el cuerpo, al mirar con detalle se pueden contar ocho ojos , esta especie  da nombre a la familia a la que pertenece, la de los palpimánidos propia de climas tropicales y con pocas especies en la cuenca mediterránea.
La pequeña pero fuerte Palmimanues gibbulus
 

Su forma de caminar resulta curiosa ya que mantiene las robustas patas delanteras levantadas como en continuo ataque.

El hábitat preferido abarca desde bosques de pinos a pedregales y forma una madriguera de telarañas un tanto irregular.
Texto y fotos: Javier Benavides y Antonio de la Blanca

jueves, 25 de octubre de 2012

SOLUCIÓN ECONÓMICA PARA AYUDAR A LA FAUNA




Uno de los problemas a que se enfrenta la fauna de nuestros campos es la falta de agua sobre todo en estas latitudes mediterráneas, desde tiempos inmemoriales el hombre se las ha ingeniado para retener el agua en albercas, presas, balsas, etc., dando lugar a que en algunos lugares estas construcciones sean los únicos puntos donde la fauna puede acudir a beber, reproducirse o dar cualquier otro uso al agua.

Alberca a la que han colocado troncos a modo de rampas para la salida de la fauna
En cierta manera estas reservas de agua han beneficiado a anfibios y peces para reproducirse y a otros grupos animales para beber e interactuar, pero también se pueden convertir en trampas mortales, ya que cuando caen los animales al ir a beber, normalmente perecen ahogados o cuando los anfibios completan la metamorfosis suelen sufrir igual destino.

Últimamente personal de mantenimiento de los parques naturales y voluntarios colocan troncos en las esquinas de las albercas facilitando la salida de los anfibios, pero también nos hemos percatado de que la gente los quita o los tira dentro impidiendo que realicen su función.

Nosotros proponemos una solución estable, fácil y económica que consiste en montar una rampa con un tablón adecuado y unas bisagras; la ejecución es tan sencilla y rápida como atornillar la bisagra a la madera en un extremo y al filo de la alberca por el otro, el resultado es una plataforma basculante que cuando la alberca está vacía daría con el fondo y cuando se llena tiende a la horizontalidad, permitiendo en cualquiera de los caso el acceso o salida de los animales,con esta solución se ahorra ladrillos, cemento, arena,agua etc materiales normalmente difíciles de transportar a los lugares donde están ubicadas dichas albercas.

Después de visitar multitud de albercas y estanques hemos sido testigos de muertes masivas de anfibios ante la imposibilidad de abandonar el agua, también se han sacado animales ahogados que contaminaban toda el agua haciendo imposible cualquier forma de vida.

Esta estructura ha sido colocada y probada recientemente, adjuntamos imágenes de la rampa que dará una idea de como realizar el montaje.

Bisagras atornilladas al tablón y al filo de la alberca
Rampa terminada de movimiento basculante y muy dificil de retirar, tiempo de montaje 30 minutos.

Texto y fotos: Jose María Glez.Cachinero y Javier Benavides.

martes, 21 de agosto de 2012

BUENAS NOTICIAS PARA NUESTROS ANFIBIOS


Hace unos días nos encontramos con la grata sorpresa de que se están rehabilitando las albercas para proteger a nuestros anfibios, siendo el sapo partero bético el directamente beneficiado ya que son puntos de reproducción de la especie.
Estas albercas están situadas en el Parque de la Sierra de Huétor y en la periferia del mismo.
Rampa para acceso y salida de anfibios


En la alberca del Parque, hace unos meses, denunciamos desde este blog que constantemente se introducían carpas que directamente depredaban las larvas de los sapos parteros, dejando el punto sin apenas ejemplares, aunque se retiraron la mayoría, siempre quedaba alguna mas avispada que escapaba a las redes, colocamos un cartel plastificado de confección casera para advertir sobre el problema. En la última visita constatamos la colocación de un cartel oficial advirtiendo el peligro e informando sobre la especie y las consecuencias de estas introducciones.

Cartel informativo sobre introducción de especies alóctonas.

En las dos albercas, también se han construido unas rampas de acceso y salida de los adultos y larvas, es una gran noticia ya que se ahorrarán ahogos, no solo de anfibios sino de otros animales que por accidente caigan al agua.

Agradecemos desde aquí a los responsables de estas modificaciones y mejoras y en especial a Emilio y a Luis ya que ellos lidian con estos problemas a diario.

Detalle del cartel
Texto: José María González Cachinero y Javier Benavides Sánchez de Molina
Fotos: José María González Cachinero

martes, 10 de julio de 2012

POBLACIONES SUBURBANAS DE ANFIBIOS AMENAZADOS



En mayo de 2011 publicamos una entrada en este blog relativa a nuevas poblaciones conocidas de una especie cada vez más escasa en el sudeste peninsular, el Sapillo pintojo meridional (Discoglossus jeanneae). Habían sido halladas en el área de influencia del núcleo urbano de Granada, en el municipio de Cenes de la Vega, por un lado, y en el valle del río Darro, dentro ya del término de Granada, habiendo permanecido hasta entonces en el más absoluto ostracismo. Casi un año más tarde, con motivo de unos censos de anfibios dentro del programa de voluntariado sobre seguimiento de herpetos en el que participamos (el programa SARE) fuimos a controlar los puntos donde reproduce esa especie. Las pasadas últimas noches de lluvias han venido también este año justo como lo que son, agua de mayo. A pesar de que por desgracia para algunas especies han llegado algo tardías las ansiadas lluvias, en general las noches húmedas primaverales han permitido a los anfibios retomar su actividad, y a nosotros, nuestro trabajo de campo.
En ocasiones ha de haber una campaña de voluntariado o un proyecto de investigación para animar a la gente a salir de noche a buscar anfibios en zonas poco conocidas. Tal es el caso que nos aconteció la pasada noche del 6 de mayo. En compañía de nuestra amiga Bea Nieto, regresando de muestrear uno de nuestros puntos de anfibios llevamos a cabo un descubrimiento de lo más interesante. Aparte de confirmar el buen estado de la población de pintojos del curso bajo del Darro, dimos, para nuestra sorpresa, con una nueva (y cercana) población del hoy día gravemente amenazado Sapo partero bético (Alytes dickhilleni), distante en más de 6 km lineales (y cruzando varios barrancos) de la localidad previa conocida más próxima a la ciudad, la de una acequia de Víznar. El descubrimiento a altas horas de la noche de un macho adulto cantando en un camino fue la guinda para una excelente “noche anfibia”. El ejemplar visto estaba acompañado en el ambiente por un coro de, como mínimo, otros dos machos más, con su característico ‘pi’, más sordo y aflautado que el del autillo común, con el que suele confundirse.
 
Macho de sapo partero bético activo por la noche en un camino en las cercanías de Granada (Foto: Juan R. Fernández-Cardenete)
Estos anfibios son “endemismos locales”, muchos de ellos considerados además especies amenazadas (el sapo partero bético es uno de los 100 vertebrados más amenazados del planeta), e incluidos en la normativa jurídica europea, la Directiva Hábitats, y en su trasposición a la legislación española en materia de protección ambiental, la ley del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, de 2007. Mundialmente, el sapo partero bético está considerado como especie Vulnerable (lista roja de la UICN, vers. 2011.2), por ocupar su distribución una superficie menor que 2.000 km2, estar severamente fragmentada, por la extensión reducida y calidad prístina de sus hábitats, así como por el número de subpoblaciones. La especie consta además en los Catálogos español y andaluz de Especies Amenazadas, recientemente revisados (2011 y 2012, respectivamente). Se encuentra amenazado a nivel mundial entre otras causas, por una nueva enfermedad emergente, una pasasitosis causada por hongos quitridios que acaban con gran efectividad con poblaciones completas.
Estas observaciones, notas de alegría para los que aún somos sensibles a estos pequeños duendes del agua, rememoran en el recuerdo de siglos atrás, en la época nazarí (y quizá hasta no hace muchos años) que anfibios hoy día amenazados como este pequeño sapo, o las desaparecidas salamandras, tritones y gallipatos, pulularon por las huertas y acequias de los por entonces arrabales de la judería granadina del Realejo y el barrio del Albaicín, que tomaban el agua de este cauce a través de las acequias Gorda y la de Aynadamar. Una ilustración histórica aparecida en la magnífica guía oficial de la Alhambra y el Generalife (2010) pone de manifiesto la presencia de estas especies. 
 
Grabado de 1623 del valle del Darro a su paso por los palacios y alcazaba de la Alhambra. Se aprecia en una bandeja varios animales considerados como “venenosos” de la época (Fuente: Bermúdez-López et al., 2010).

 
  La preservación de estos últimos reductos de especies amenazadas increíblemente bien conservados en parajes aún idílicos pese a la cercanía a la ciudad de Granada, se torna una responsabilidad de todos, y como el conocimiento implica responsabilidad, ahora de la nuestra. Proyectos como el cierre norte de la circunvalación de Granada atravesando el valle del Darro, o los de ubicar en la zona de Jesús del Valle campos de golf y otras infraestructuras pondrían sin duda en peligro a estas poblaciones que aún resisten el paso de los años y las épocas de desarrollismo pasadas y recientes. Actualmente perviven las últimas reminiscencias de un pasado de esplendor que esperemos no olvidar nunca. Valga este pequeño aporte en nuestro empeño.
Bibliografía
Bermúdez López, Jesús y otros: La Alhambra y el Generalife, Guía Oficial. TF Editores, 2010. ISBN 978-84-86827-28-1
Pd. De ambas poblaciones se ha redactado y enviado sendos informes exhaustivos a las autoridades ambientales competentes en materia de gestión territorial y protección de la biodiversidad.

Enlaces :

Autor Texto y Fotos : Juan Ramón Fernández Cardenete