miércoles, 3 de junio de 2015

La Charca del Puerto, una asignatura pendiente

Dentro de la provincia de Granada, la zona más occidental es la que presenta una mayor diversidad de anfibios debido, sobre todo, a que por allí penetran los frentes húmedos procedentes del atlántico. También influyen factores geológicos y topográficos locales, como ocurre en el Llano de Zafarraya, donde la existencia de un gran acuífero con un nivel freático superficial propicia la formación de pequeñas charcas.

Charca del Puerto
Una de estas charcas es la del Puerto, de aguas permanentes y con unas dimensiones de 50 x 30 m. En ella se han detectado siete especies de anfibios: gallipato (Pleurodeles waltl), tritón pigmeo (Triturus pygmaeus), ranita meridional (Hyla meridionalis), sapillo moteado ibérico (Pelodytes ibericus), sapo común (Bufo spinosus), sapo corredor (Bufo calamita) y rana común (Pelophylax perezi), con lo que este lugar es, probablemente, el enclave granadino con mayor diversidad de anfibios. A estas especies hay que añadir algunos reptiles acuáticos o que viven en sus orillas, como el galápago leproso (Mauremys leprosa), eslizón tridáctilo (Chalcides striatus), culebra viperina (Natrix maura) y culebra de collar (Natrix natrix).

Gallipato
La Charca del Puerto se encuentra en la base de la Sierra de Loja, un lugar recientemente declarado Zona de Especial Conservación (ZEC). Cuando la administración sacó a información pública los límites provisionales de esta ZEC, la Asociación Herpetológica Granadina (AHG) presentó una alegación para que se incluyera la charca del Puerto, que había quedado fuera de la ZEC por sólo 200 metros. Por desgracia, hace unos días se han publicado los límites definitivos y nuestra alegación no ha sido aceptada. 

Puesta de sapillo moteado ibérico 
El principal problema de este lugar es que hace pocos años algún irresponsable introdujo carpines (Carassius auratus), que actualmente son muy abundantes. Está comprobado que esta especie depreda sobre huevos y larvas de anfibios, por lo que es probable que ésta sea la causa de que en los últimos años se haya notado una disminución general en los anfibios de la charca, y que algunas especies sean ya difíciles de detectar, como la ranita meridional.

Pareja de sapos comunes copulando

El pasado mes de abril, la AHG firmó un convenio con el ayuntamiento de Zafarraya, propietario del terreno, para realizar un seguimiento de las poblaciones de anfibios y llevar a cabo algunas actuaciones de mejora, aunque la principal acción que debería ejecutarse, en este caso a cargo de la administración ambiental, debería ser la completa erradicación de la plaga de peces.