miércoles, 16 de marzo de 2011

UNA VISITA NOCTURNA AL PARQUE DE HUETOR

                                          Sapo corredor esperando a su pareja

 

     La observación de la naturaleza por la noche está limitada lógicamente por la falta de luz. Normalmente los vertebrados mas fáciles de ver son las aves y los reptiles, la mayoría diurnos, pero hay otros grupos que tienen su actividad nocturna como son los mamíferos y los anfibios. Los primeros son mas esquivos y difíciles de detectar; sus apariciones son fugaces y algunos sólo nos dejan rastros. Los anfibios, por otra parte, en determinadas épocas del año se delatan por sus cantos y nos dan el espectáculo de sus amplexos y diversidad de sonidos.
     El pasado viernes con el tiempo húmedo y medio chispeando realizamos una incursión en una de nuestras sierras mas cercanas a la ciudad de Granada, la Sierra de Huétor. La idea era realizar escuchas de anfibios en los pocos puntos acuáticos que el parque tiene. La verdad es que ese día no estaban muy cantarines, no obstante, en el primer sitio que era un pequeño manantial, vimos algunos ejemplares larvarios de sapillo pintojo, lo que nos dio la primera alegría ya que es una especie puntual en el parque, seguimos el recorrido por la carretera principal, con los oídos atentos, y no se dignaron ni siquiera a tararear, de todas formas en las charcas ocasionales que se forman cerca de la carretera había algunos ejemplares de sapo corredor y ya tenían sus cordones de huevos recién puestos.
   El ausente fue el sapo partero bético, un endemismo ibérico con una distribución que prácticamente ocupa la provincia de Granada y parte de las provincias limítrofes, esperábamos oír su canto aflautado pero parece que no fue el día propicio.
   Aunque el Parque no tiene buenos puntos de agua, los anfibios sobreviven en algunas charcas temporales y albercas forestales, otras especies presentes en el Parque Natural son el sapillo moteado, la rana común, el sapo común y cerca del límite subsisten pequeñas poblaciones de gallipato. La salamandra habitó esta sierra, pero no se tienen noticias de su presencia desde finales del siglo xx.
   Es lamentable que, salvo puntuales actuaciones, no se haya cuidado la conservación de los escasos puntos de agua en el Parque Natural de la Sierra de Huetor; no solo sirven para la reproducción de los anfibios sino para dar cobijo a toda una comunidad de invertebrados y dar de beber a la fauna de la zona.
  La excusa fue buena para estar en el bosque por la noche, disfrutando otro aspecto de la naturaleza.

jueves, 10 de marzo de 2011

¿PARA CUANDO UNA REGULACIÓN DEL TEMA?

Peces de colores donde había sapos y ranas

La perdida de hábitat es uno de los factores mas grave para la regresión de los anfibios en España.
Observamos como se destruyen de la noche a la mañana charcas, albercas, pilones o pozos que tradicionalmente habían sido hábitats para numerosas especies.
Las asociaciones conservacionistas venimos reclamando unas leyes menos permisivas para la modificación de hábitats de este tipo, aunque se hagan en lugares de propiedad privada, ya que la mayor parte de los habitats propicios para anfibios se encuentran en fincas particulares.
Los propietarios la mayor parte de las veces ignoran los perjuicios ambientales de algunas de las actuaciones que se cometen, y con una simple charla con ellos, en muchos casos, basta para que se apliquen medidas correctoras de esa misma actuación planificada.
Un ejemplo de lo expuesto se pudo comprobar el día 7 de marzo en el paraje de fuente Grande.
de un sumidero se sacaron media docenas de ranas que estaban atrapadas, ya el año pasado por las mismas fechas se sacaron del tubo otra docena de cadáveres de rana y otras tantas de ranas escuálidas casi muertas de inanición. Al lado del mismo, en la antigua alberca los sapos parteros han desaparecido por la introducción de carpas de colores.
A esto se le suma que la salida es imposible para los animales que consiguen entrar y que proyectan convertirlo en aljibe. Una serie de catastróficas amenazas para un hábitat que años atrás había sido el hogar de toda una comunidad de animales y plantas.
Es necesario ya una normativa legal para que la transformación de habitats acuáticos tradicionales no siga descendiendo día por ida, por ello lucharemos.

                                                       Trampa mortal para la fauna

domingo, 6 de marzo de 2011

SE PERDIÓ UNA BATALLA, NO LA GUERRA

                                                   Anochecer en la charca

Hace diez años en una laguna del termino de Zafarraya, unos visitantes foráneos soltaron unas carpas de colores, imaginamos  que sin intención  de crear un desajuste ambiental. Sin embargo desde aquel entonces la comunidad de anfibios comenzó a menguar en numero de ejemplares y especies hasta llegar casi a una extinción masiva en la charca.
Durante unos años los anfibios resistieron la presión piscicola en unos pozos que habia cerca de la laguna, sin embargo alguien volvió a las andadas y esta vez soltaron peces en algunos de los pozos dandoles la puntilla final a algunas especies.
Durante cada año de estos últimos diez, miembros de nuestro grupo  realizaron inspecciones visuales por la noche dando resultados negativos en cuanto a presencia de anfibios. Solo algún año pudimos localizar rana común y gallipato, estos últimos en alguno de los pozos sin peces.
La administración fué informada de este hecho por la Asociación Herpetologica Granadina, aunque no parece que el aviso haya tenido el remedio esperado.
Cuando ya se daba por perdida la esperanza para la recuperación de la comunidad anfibia, en una ultima inspección el día 24 de febrero del 2011 volvimos a observar anfibios en la laguna.
Las especies del listado y su numero es el siguiente;
30 tritones pigmeos, 9 gallipatos, 4 sapos comunes y 24 ranas comunes.
Nos sorprendió que la especie mas frecuente fuese el tritón pigmeo y nos agradó ver sapo común, infrecuente en la laguna, sin embargo no se encontraron ranitas meridionales ni sapillos moteados, especies antes frecuentes.
Aunque los peces siguen habitando la charca, nos ha alegrado que los anfibios vuelvan a recolonizarla por si mismos, esto demuestra que en ocasiones subestimamos el poder de regeneración de los habitats.
Desde nuestro Blog queremos alertar del daño que se pueden cometer con acciones incívicas como la introducción de especies foráneas en el medio ambiente.

viernes, 4 de marzo de 2011

COLONIZACIÓN DE CHARCA CINEGETICA POR SAPO COMÚN

Hace ahora dos años la sociedad de cazadores de Illora (Granada) realizó la construcción de una serie de charcas repartidas por las sierras de Madrid y Pelada. En concreto eran cuatro charcas. Estaban situadas formando un rosario en el interior de dichas sierras. La  naturaleza caliza de las mismas hace casi inviable los afloramientos de agua superficial en el interior de estas sierras, aunque los manantiales y arroyos son frecuentes en su área perimetral.
Aunque en un principio las charcas estaban pensadas para el abastecimiento de agua a las especies cinegéticas, otras muchas se aprovechan de ellas. Hemos censado mas de cuarenta especies de aves y algún reptil que también se ha observado beber en verano.
La colonización en la segunda temporada desde que se construyeron nos anima a pensar que estas actuaciones deberían de tenerse mas en cuenta y que otros colectivos afines deberían ponerlas en practicas en otros cotos.
Las charcas están cerradas al paso del ganado y los jabalíes con malla cinegética y su interior tapizado de piedra caliza de la zona. Las  balsas  mantienen agua de lluvia practicamente todo el año y la zona es potencial para ser colonizada por otros anfibios localizados en las estribaciones, entre ellos el sapo partero bético, una especie catalogada de vulnerable en Andalucia.
Pareja en amplexo axilar, cordillera Subbetica Cordobesa, marzo 2005
El sapo común es una de las pioneras en colonización de charcas, entendemos que por su tamaño y capacidad de movimiento que no suele superar los dos kilómetros en ninguna de las especies, pero como sugiere Ricardo Reques, (coordinador del SARE en Andalucia Occidental), esto puede ser diferente en ambientes mediterraneos mas secos.